Hay buenas razones para casarse y otras que parecen menos buenas. El joven Asa tiene razones más que extraordinarias para lanzarse a la búsqueda de una esposa. Acaba de terminar el servicio militar y es enviado de nuevo a la estepa kazaja pero lo que él querría ser pastor de cabras. Para poder lograrlo y poder tener su proprio rebaño habrá de casarse, según reza la tradición. El problema es que la única que él consideraría para tal propósito, la tímida Tulpan, no tiene ningún interés. Tanto es así que nada de lo que él posee, llama, de ninguna manera, la atención de ella. Lo único que ella ve en él son unas orejas de sopillo que le parecen razón suficiente para rechazarlo. El continuo rechazo de ella al cortejo parece ahogarlo y pierde la esperanza pero decide que será fiel a su deseo y seguirá adelante con la idea de ser pastor.
La película ha sido premiada en innumerables ocasiones, como en Cannes en la categoría Un certain regard. Es una de las pocas películas (comedia) que llegarán a nuestros círculos cinematográficos que haya sido producida en Kazajistán. Parece que incluso si fuera sólo por eso, merecería la pena darle una oportunidad.
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