A pesar de contar con una de las mejores historias posibles para sacar adelante un proyecto cinematográfico, Gear of War no parece convencer a los productores de Hollywood. Eso confirmaría el que llevaran al menos cuatro años mareando la perdiz al respecto de ello.
Ahora sabemos que se produjo un drástico recorte de presupuesto en su desempeño. Alejándose del épico inicio de la superproducción que podría desembocar en una franquicia. Eso o sus responsables tendrán que rentabilizar bastante el proyecto.
Microsoft, propietaria de la marca Gear of War no consigue la financiación necesaria para ello. Algo que también le pasa con otro de sus proyectos estrella para el cine, Halo.
Esperemos que Len Wiseman haga un buen trabajo a cargo de Gear of War. Al menos cuando le consigan sacar unos millones a Hollywood. Ojala la podamos ver en 2012. Aunque parece más bien un sueño que otra cosa.
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